Sixpencer Trial Sweden
24 y 25 de octubre, 2009
Göteborg, Suecia
   
2 Días Trial Clasico en Suecia
Texto: Jaume Casadesús
Fotos: Maarten Mager

   "Ataque de cuernos..."

El grupo de españoles que se desplazó hasta Suecia

Ante la ausencia este año de los 2 Días de Cabrianes, su impulsor Jaume Casadesús aprovechó la ocasión para escapar a Suecia, donde con un buen grupo de amigos disfrutaron del Sixpencer Trial Sweden organizado por el club SMK Göteborg, un bonito trial de clásicas copn categoría Twinshok y Pre-65. El mismo Jaume nos cuenta la experiencia...

Me lo dijeron y no me lo podía creer: después de diez años, ¡mi amigo Eric me dejaba por una sueca!.

¡Ah, no!. ¡Eso si que no!, le dije. No me iba a quedar impasible viendo como se consumaba esta "infidelidad". Mi reacción fue: si tú te vas a Suecia, yo también. De esta manera podré saber de primera mano si tengo que temer por "nuestro matrimonio" evitando enterarme por terceros.

Algunos amigos no quisieron dejarme solo ante esta situación tan delicada y se ofrecieron para acompañarme dándome así su apoyo. ¡Gracias colegas! (Joan Rovira Llopis, Jaume Casadesus Griera, Angel Magrina, Pere Abadal Fite, Xavier Miravel Tejedor, Xarli Saludes, Ramon Palau y Tomás Pérez García).

Un juez-piloto acompaña a cada grupo de 7 u 8 pilotos

Es de agradecer que en momentos como esos, puedas contar con el calor de los tuyos, y más en tierras tan inhóspitas, lejanas, frías...

Bueno, dejémonos ya de metáforas y vayamos al grano.

Lo que en principio tenía que ser una pequeña expedición de tres o cuatro en mi furgo, se convirtió en un asalto en toda regla que nos obligó a alquilar una furgona más grande en la que nos cupieran las nueve motos amén de todos los enseres de los "intrépidos aventureros". ¡Se van a enterar estos rubiales!.

El viaje en si no es ninguna tontería, 2500 km hacen que te platees si realmente vale la pena emprender una experiencia de este calibre hacia un destino incierto (nunca antes había oído hablar de triales de clásicas en ... ¡Göteborg!).

No tenía ni idea de lo que se cuece tan al norte. Pero, como dijo aquél, "sobre cobardes no hay nada escrito". Así que allá vamos.

Nos esperan tres días de carretera y manta, pero es que a mí me gusta - qué le vamos a hacer, me va la marcha-. Los demás, naturalmente irán en avión. Tres horitas y se plantarán en en Suecia tan ricamente.

Xarli Saluces

La organización propone un albergue cercano al trial como alojamiento. De modo que hacia allá nos dirigimos y la verdad es que está muy bien. Dispone de todos los servicios -incluyendo ¡una sauna! -y ,además, por un módico precio.

La primera sorpresa nos la llevamos en la cola de las inscripciones. ¡Alguien nos habla en español!. Juan es un piloto malagueño que reside en Dinamarca desde los 18 años. Ahora, siendo ya abuelo, no se plantea volver a su tierra si no es de vacaciones...

Juan pilota una de las escasas Montesa 330 que hay fuera de España. Enseguida nos pone al corriente del funcionamiento de la prueba. Se organizan grupos de 7 u 8 pilotos que van acompañados de un juez-piloto que conoce la ubicación de las zonas, saltando de unas a otras en función de las colas.

El grueso del paddock (unos 70 participantes) lo componen suecos, daneses, finlandeses, franceses, holandese, belgas, algun alemán y este año también... ¡catalanes!.

Triffield M. Jansson con una Triumph pre '65

Una curiosidad: a Noruega no ha llegado todavía la "fiebre clásica", pero está al caer. El fotógrafo que firma este reportaje se ha empeñado en promocionarla en su país...

Otra sorpresa: el marcaje de las zonas es de lo más primario. En lugar de cinta, delimitan la zona con ramas caídas de los árboles que se encuentran por doquier. Eso hace que una vez finalizada la prueba, con llevarse las puertas y las escasas flechas que señalan los dos niveles de dificultad, ¡se acabó el desmarcaje! Además, se deja para la siguiente carrera si la organización lo cree conveniente. A lo largo del recorrido pueden verse zonas utilizadas en años anteriores. ¡Y van 53!.

El nivel alto de dificultad en las zonas sería un amarillo de aquí. El bajo, ni te cuento. En eso también estamos a 2500 km... El trial consiste en doce zonas que deben hacerse dos veces, y entre vuelta y vuelta, un receso para tomar el riquísimo caldo (o lo que quieras) que propone la organización.

Hay bastantes pre-65, algunas de ellas rígidas, pero la mayoría son twinshocks.

Angel Magriñà

Aunque dan cabida a las motos modernas, apenas vi un par de Betas, una TR34 y una Techno que, para más inri, atacaban las zonas de nivel más bajo. En su favor debo decir que eran pilotadas por "venerables ancianos". Me llamó la atención uno de ellos que lucía un dos-piezas de cuero propio de moto de carretera... Había nada menos que seis pilotos mayores de 70 años...

El segundo día más de lo mismo aunque las zonas se hacían en sentido contrario y algunas de ellas eran nuevas. La lluvia hizo que dos de esas, que en la primera vuelta no revestían gran dificultad, se complicaran enormemente con el paso de los pilotos, haciéndolas prácticamente imposibles excepto para nuestros cracks Angel Magrinyá y Joan Rovira que, a la postre fueron los que se llevaron el gato al agua en la máxima categoría. En la otra, el triunfador fue Agustín Fernández, quien llevó su Honda a lo más alto del cajón.

Sin embargo los resultados (todos coincidimos en ello) son lo de menos, nos quedamos con la excelente y cálida acogida que nos brindaron los vikingos que resultaron ser unos excelentes anfitriones.

Olvidaba decir que Eric se lesionó el primer día al girársele la rodilla en una de las "resbalósicas" piedras. Pasó el sábado en el hospital y el resto de las vacaciones en muletas... ¿Castigo divino?...

   Reportajes Triales de Clásicas 2009