Prueba
   
Sherco 2.9 2003

Texto y fotos: Ramón Sallés
Acción: Marc Freixa, Ramón Sallés
Colaboración: Xavi Vilalta


   PLAY WITH GRAVITY

  Jugar con la gravedad, tal como podéis leer en el adhesivo que adorna su guardabarros trasero, es con la nueva entrega de la Sherco casi un juego de niños. Sin duda el slogan es de lo más acertado, y más cuando la Sherco 2003 llega a Todotrial.com precedida por la excelente fama cosechada por el modelo del que los clientes de la marca habéis podido disfrutar durante la temporada que ya termina.

   Muchos de vosotros recordaréis, después del ensayo del año pasado y de la comparativa que publicamos a principios de este, que las principales modificaciones que había recibido el modelo 2.002 iban encaminadas a conseguir que la moto "pisara" las zonas con mucha más firmeza, intentando corregir la tendencia a ponerse rápidamente a una rueda que tenía el primer modelo de la actual saga Sherco, lo que podía en cierta forma complicar un poco la vida a los pilotos con menos dotes malabaristas.

   Como ya os confirmamos hace doce meses el objetivo se cumplió con creces y es por eso que para el modelo 2.003 en la fábrica de Caldes de Montbui se han tenido que poner las pilas con la finalidad de mejorar aún más una moto que estaba ya a un nivel altísimo.

   El reto era pues, conseguir mejorar otra vez las buenas maneras de la moto en cuanto a la ligereza del tren delantero, pero sin perder ni un ápice de la "pisada de Golf GTI" que siempre tiene en mente Josep Paxau. En cuanto al tema motor poca cosa quedaba por hacer, ya que el propulsor de la Sherco es sin duda toda una referencia en el mundo del trial por su potencia y progresividad.

   ¿El resultado?, pues aquí tenéis nuestras conclusiones después de un par de días con la moto y una matinal entera con Marc Freixa.

   Nuevos colores

   Lo primero que veremos en la nueva Sherco son los nuevos colores de la moto, ya que el azul deja de ser protagonista absoluto y pasa a combinarse, en nuestra opinión de forma más que acertada, con el amarillo de los nuevos adhesivos y el plateado de la parte superior del depósito de combustible. Con ello se consigue una imagen más liviana y a la vez mucho más elegante de la moto sin perder ni un ápice de ese "look" racing que tienen todas las trialeras de esta marca.

   Al mismo tiempo las partes en aluminio son ahora pulidas pero en semi-mate, lo que también ayuda, y mucho, en lograr una apariencia menos estridente.

   Siempre hemos dicho desde Todotrial que contra gustos no hay disputas, y que por lo tanto lo que a unos nos puede parecer acertado a otros les puede parecer lo contrario, pero a tenor de las opiniones de los aficionados que vieron la moto mientras hacíamos las pruebas, creemos que en general el nuevo aspecto gusta mucho más que el del modelo 2.002.

   Retoques en el chasis y las suspensiones...

   Hemos abierto esta prueba con los comentarios sobre los objetivos buscados por los ingenieros de Sherco al modificar el chasis de la 2.003, y para conseguirlo se han diseñado unas nuevas geometrías cerrando ligeramente la pipa de la dirección, y a la vez retrasando ligeramente el eje de la rueda trasera para con ello intentar mejorar un poco la manejabilidad de la moto sin perder nada del aplomo conseguido con el chasis de la 2.002.

   En cuanto a las suspensiones la nueva Sherco continúa confiando en la Paioli delantera y en el mono-amortiguador Ollé para hacer que la moto se "coma" los obstáculos sin más problemas. Para ello se han continuado desarrollando ambos elementos, modificándose los reglajes internos de la horquilla italiana y también las especificaciones en el amortiguador posterior, con la finalidad en ambos casos de mejorar algunos aspectos en el comportamiento de unos de los componentes más importantes hoy en día en una moto de trial.

   Y en el motor

   Esta vez le ha tocado el turno al embrague y a las relaciones de cambio, que han sido modificados buscando un mejor tacto y resistencia al uso intensivo, en el primer aspecto, y una mejor posibilidad de utilización en cuanto al tema de las marchas. Como veremos en la prueba dinámica sin duda este será uno de los puntos fuertes de la moto del 2.003, ya que la mejora ha sido importante.

   Aunque no sea parte del motor, pero sí un elemento básico para el buen funcionamiento del mismo, hay que citar en este apartado que nuevamente la caja del filtro de aire se ha modificado ligeramente con la finalidad de lograr una mayor estanqueidad y un mejor control del flujo de aire hacia la tobera del carburador.

   La Sherco en las zonas, el turno de Marc Freixa

   Quedamos con Freixa y con Xavi Vilalta en Motos Paxau, y desde allí nos fuimos directamente a una de las zonas de entreno de Marc, en las inmediaciones de Sant Pere de Torelló. El día era bueno, soleado pero algo fresquito, por lo que las condiciones eran las ideales para probar la moto. Mientras Marc calentaba un poco el motor nos fue explicando su opinión sobre las modificaciones del modelo 2.003, que en definitiva son las mismas que él ya ha ido incorporando a su moto durante la pasada temporada.

   En primer lugar, y como os decíamos antes, la geometría del chasis ha variado ligeramente con la finalidad de aligerar un poco la rueda delantera, cosa que según Marc se notaba bastante nada más montarse en la moto, y aunque en principio se podía pensar en que eso podría comportar una moto más "técnica", en realidad el modelo 2.003 tiene prácticamente el mismo aplomo que la moto de este año.

   Freixa empezó con una serie de zonas sobre grandes rocas, en pleno sotobosque, que superaba con relativa facilidad, aunque alguno de los escalones quitaban realmente el hipo, pero aquí la excelente potencia del motor y su no menos destacable estirada hacían que la Sherco subiera sin problemas por donde Marc se proponía.

   Para apreciar "in situ" las virtudes del nuevo chasis, Xavi Vilalta le marcó a su pupilo una zona que consistía en un recorrido sobre piedras dispersas sobre la hierba, pero con la condición de pasar de una piedra a otra sin que ninguna de las dos ruedas tocara precisamente la capa verde del suelo.

   El tema estaba en que en alguna de esas piedras no cabía la moto de ninguna de las maneras, por lo que el piloto solo podía usarlas para servir de base a una de las dos ruedas, mientras que tenía que intentar colocar la otra rueda en otra de las piedras marcadas por Vilalta.

   La verdad es que ver lo que hace uno de los pilotos "top" es todo un espectáculo en los triales del fin de semana, pero lo que curran entre semana entre bastidores es mucho más digno de mención. Marc se paso un rato largo haciéndose la zona en un sentido y otro, hasta que Xavi le dijo que a partir de ese momento tenía que hacer lo mismo pero en solo un minuto y treinta segundos.

   Realmente entonces pudimos apreciar lo que nos había anunciado el piloto de Sherco, y es que la moto se movía con muchísima soltura de un obstáculo al otro, y la sensación de ligereza al tirar del tren delantero era patente.

   Después de eso llegó el turno de las "enchufadas", y para ello nos movimos apenas medio kilómetro hasta llegar a una ladera escarpadísima, desde se contemplaba un paisaje realmente precioso de toda la Plana de Vic. Allí Marc continuó subiendo y bajando escalones, esta vez marcados sobre la piedra gris, laminada y poco consistente típica de muchas de las montañas de la zona. Se trataba de demostrar como habían afectado las variaciones en las relaciones de cambio a la moto del 2.003 y para ello se marcaron una trazada a base de continuas subidas y bajadas en diagonal, que terminaba en una empinadísima subida, muy resbaladiza, en la que había que dar poquísimo gas al inicio con la finalidad de que la moto cogiera tracción, para continuar aumentando poco a poco las revoluciones del motor al mismo tiempo que la moto ganaba velocidad para poder remontar la fuerte pendiente final.

   Desde nuestra privilegiada posición, comentamos con Xavi Vilalta lo bien que respondía la moto a las exigencias de Marc, y es que éste casi la "mataba" al hacer la última curva y después le daba al mango casi sin tocar el embrague a lo que la Sherco respondía con un par motor y un empuje impresionante. Según Xavi con el modelo 2.002 la subida era de tercera, porque la segunda se hubiera quedado un poco corta, aunque en manos de un piloto menos experto y a pesar de la buena potencia del motor 2.9 de la Sherco la pendiente seguro que presentaba problemas. Con la 2.003 podían encarar la subida perfectamente en segunda, ya que al ser algo más larga que la del modelo de este año el motor estiraba bastante mejor en esta marcha y el plus de tracción era resaltable. Por otro lado también la tercera se podía usar, ya que apenas variaba en relación a la 2.002, con lo que el piloto tenía dos opciones con las que jugar.

   El alargar la segunda marcha tiene como consecuencia que la primera también se alarga un poco y ahora es aún más utilizable, con lo que en la práctica Marc nos decía que ahora es una marcha más que recomendable para muchas zonas en las que es necesario rodar lento y con mucho tacto de la moto. Hay que recordar que ya en el modelo 02 la primera marcha se alargó un poquito, y en la 03 se ha dado otro paso en este sentido. En cierta manera lo que se ha hecho es juntar un poco más las tres primeras marchas, con lo que ahora el piloto tiene verdaderamente donde escoger al abordar cualquier obstáculo, ya que casi siempre podrá optar perfectamente entre dos relaciones, con lo que la posibilidad de afinar teniendo en cuenta la naturaleza de la zona es mucho mayor.

   Freixa continuó demostrando lo que es capaz de hacer una Sherco, y la verdad es que una vez más quedamos prendados de lo bien que suena y respira el motor de la moto. Un propulsor con tacto de seda, pero que cuando su piloto le pide guerra se convierte en un auténtico misil.

   El resto de la moto ha cambiado poco, y Marc únicamente nos mencionó que los retoques en la amortiguación habían acercado un poco más la moto al punto óptimo.

   Habían pasado cuatro horas en un suspiro, y después de charlar un rato con los dos hombres de Sherco, y mientras Marc recuperaba un poco el aliento después de otra "tunda" de miedo saltando rocas nos despedimos . Una vez más, gracias a Marc y a Xavi por su disponibilidad y amabilidad.

   Y ahora la Sherco para los trialeros de a pie

   Nunca mejor dicho, porque pies, y muchos, son los que ponemos los simples aficionados al trial pero, ¡qué diablos, por moto que no quede!

   Si esta es tu máxima sin duda la Sherco 2.003 va a cumplir con creces tus expectativas, ya que después de pasar un fin de semana con ella, la verdad es que al menos a nosotros nos dejó más que convencidos.

   Hemos intentado rebobinar nuestras vivencias trialeras hasta finales del 2.001, cuando también tuvimos una Sherco aparcada en el garaje durante unos días, y para ello nos hemos vuelto a leer la presentación de la 02 y la comparativa (disponibles en vuestra web favorita con solo cliquear en la sección de pruebas).

   Si hacéis lo mismo y continuáis leyendo estas líneas muchos de vosotros os daréis cuenta de que lo que ha hecho Sherco es pulir aún más las virtudes del modelo anterior, que van a hacer de la 03 una moto polivalente tanto para un trialero novato que está empezando en esto como para un experto con un nivel alto de pilotaje. Casi siempre todos los aficionados hemos dividido la oferta de motos de trial entre las motos "fáciles" y las "extremas", añadiendo el marchamo de muy competitivas a estas últimas, y aunque Montesa-Honda y Dougie Lampkin se han encargado de demostrar que con una moto del primer tipo se puede ganar el mundial un año sí y el otro también, sí que es verdad que Sherco ha conseguido que sus motos amplíen de forma importante el abanico de potenciales clientes.

   Y es que la Sherco, a pesar de su aspecto racing no "asusta" de ninguna de las formas al trialero que no quiere complicarse la vida en las zonas, pero al mismo tiempo ofrece al que "quiere guerra" un arma temible para ganar cualquier trial.

   Bueno, dejémonos de parloteo y pongamos en marcha la Sherco, a ver que nos cuenta la más azul de las trialeras actuales. Primero comprobamos si el grifo de gasolina está abierto y no hay problemas, se llega bastante bien con los dedos, pero el depósito de gasolina, de plástico blando, es extremadamente flexible en la zona del grifo, que al menos en la unidad que nos cedieron se movía exageradamente, incluso dejando escapar algunas gotas de gasolina. Un punto a revisar. Las segundas partes nunca fueron buenas, dicen por ahí, y en este caso la segunda parte consiste en tirar del aire, cosa que en la 03 no es tan fácil como en la moto del año pasado, ya que el tirador no tiene la práctica tira de plástico, a modo de brida, que ayudaba muchísimo a que esta maniobra no fuera un problema, al menos con los guantes puestos.

   Bueno, ya está. Primera patada y la moto se pone en marcha sin ningún otro problema, y mientras quitamos el aire y la calentamos brevemente con suaves acelerones volvemos a disfrutar nuevamente del peculiar sonido de esta moto, que como ya hemos dicho antes al menos a nosotros nos encanta. La verdad es que la Sherco suena muy limpia y el leve toque metálico que tiene el sonido que deja escapar el especial silencioso de estas motos le da un tono "pata negra" imposible de encontrar de momento en ninguna otra moto de trial.

   El motor acompaña en todo momento a que nadie desafine en el concierto, y apenas se notan ruidos internos, incluso con la moto totalmente fría.

   Nos ajustamos el casco y al poner la primera marcha volvemos a acordarnos del embrague de la 02, perfecto, que se repite en la 2.003, y es que el tacto es muy suave pero especialmente muy uniforme en todo el recorrido de la maneta, con lo cual en todo momento la sensación de control sobre este elemento está garantizada. El cambio de marchas está a la misma altura que el embrague, preciso, muy suave, pero sin tacto pastoso, y nada ruidoso.

   Primera, segunda, tercera.... y a los pocos metros, y sin llegar siquiera a las zonas, ya empezamos a notar que la relación de cambio es algo más cerrada, al menos en estas tres marchas. Esto promete, y la verdad es que nada más empezar a rodar con la Sherco tienes ya la sensación de que llevas mucho tiempo con ella. Es casi como probarse ropa en cualquier tienda y ponerte un abrigo que te cae perfectamente al momento, como si te lo hubieran hecho a medida. Pocos pilotos tendrán problemas en este sentido.

   La sensación de moto conocida se acentúa mientras rodamos rápido por los caminos que nos conducen al grupo de zonas, la Sherco responde rápidamente a cualquier cambio de trayectoria simplemente pisando con fuerza en el estribo correspondiente, pero transmite una estupenda sensación de seguridad. El motor poco a poco ya ha tomado temperatura y estirando las marchas enseguida notamos lo que puede llegar a dar de sí, empuja desde cero como si fuera eléctrico, sin vacíos, y estira una auténtica barbaridad, y es que este 2.9 es sin duda uno de los mejores propulsores que han salido de la mesa de dibujo del "mago" Paxau.

   Primeras zonas, conocidas sobradamente para así tener referencia claras, y volvemos a tener las mismas sensaciones que en el recorrido por el camino, esta moto es fácil. El terreno es arenoso y resbaladizo, aquí probaremos que tal va de tracción la moto azul, y después de hacernos unos cuantos giros seguidos de escalones (bueno, escaloncitos para lo que se estila hoy en día), hay que decir que la 2.9 2003 sigue en línea con la 2.002. La Sherco tiene un magnífico equilibrio y es facilísimo "puntear" las piedras con la rueda delantera al hacer los giros ya que la sensación de ligereza es muy importante, pero al mismo tiempo la moto tracciona también de forma destacable, aunque hay que decir que es necesario llevar el cuerpo un poco más atrás de lo que sería necesario en una Montesa o en una Scorpa, por ejemplo. De todas formas esto se ha corregido bastante con respecto a la 02, ya que las tanto las estriberas como la rueda trasera se han retrasado unos mm. y ahora la posición del cuerpo está ya de entrada algo más cargada sobre la parte trasera de la moto.

   Pilotando la Sherco tienes que acostumbrarte a moverte un poco sobre la moto, cambiando pesos sin miedo a reacciones extrañas, y es entonces cuando realmente podrás disfrutar de lo mejor de los dos mundos, es decir, por un lado te da la sensación de que eres todo un "top" ya que pones la rueda delantera donde quieres, y por otro la moto no te deja en la estacada con el consiguiente patinazo al perder adherencia la rueda trasera. Paxau y Cia. han conseguido a base de trabajo el colocar a su moto justo entre el perfeccionismo y alto nivel de exigencia de una Pro y el carácter más "apacible" de una 315R.

   No quiere esto decir que la Sherco traccione como una Scorpa, por ejemplo, pero sí que mantiene un estupendo compromiso entre ligereza y temple que va a permitir a muchos aficionados el salir de una zona pensando eso de "que bien lo he hecho", que en definitiva es lo que la mayoría buscamos después de un buen desayuno con los amigos en nuestro restaurante preferido en plena montaña o cuando estamos compitiendo con ellos en el campeonato de nuestra comarca. Si en cambio eres un auténtico crack del trial, solo hace falta que te leas el apartado de Marc Freixa para ver las posibilidades de esta moto.

   La siguiente zona tiene una bajada importante, también sobre arena y piedra suelta, y aquí aprovecharemos para ver que tal vamos de frenos. Aquí la Sherco 03 mantiene el buen nivel de la 02, y el disco delantero es potente y bastante progresivo, aunque quizás no hubiera venido mal el montar uno perforado, como el que ya llevan casi todas sus rivales.

   Ahora tenemos delante unas cuantas rocas de diferentes tamaños y vamos a por las suspensiones. En primer lugar hay que resaltar la importante mejora en el comportamiento de la suspensión delantera, una Paioli fabricada a la medida para Sherco, que logra un excelente compromiso entre rapidez y capacidad de absorción. Buscando la palabra exacta, el tacto de la horquilla hace la moto más "precisa" en cuanto a la parte delantera. El amortiguador trasero continua sin tener quorum entre los pilotos, y es que si bien para el nivel del aficionado medio no presenta problemas y además es lo suficientemente rápido para ayudar a levantar con facilidad la rueda trasera, cuando se encaran obstáculos importantes para algunos continua siendo bueno, mientras que otros lo encuentran algo impreciso. En fin, cuestión de gustos.

   Y para acabar unas cuantas subidas, lentas con rocas intercaladas, o rápidas sobre tierra suelta para echar una ojeada a las relaciones de cambio. Ya os hemos adelantado que el cambio de marchas es toda una delicia, muy en la línea de los productos de la marca, y destaca especialmente por su precisión, aunque en la edición 03 lo más importante es la modificación en las relaciones de cambio que han dejado las tres primeras mucho más cerradas, y en nuestra opinión prácticamente perfectas, ya que en primera se pueden hacer un montón de zonas, dado que el motor 2.9 estira muchísimo, mientras que la segunda continúa siendo ideal si quieres una mejor tracción o una punta más de velocidad en la zona.

   Ahora casi podemos asegurar que en la mayoría de zonas el piloto amateur tiene a su disposición dos marchas donde elegir, con lo cual la moto se adapta mucho mejor al tipo de pilotaje de cada uno de nosotros. La tercera tampoco hay que perderla de vista, y una vez más ayudados por el excelente par motor del propulsor y por el progresivo embrague, es una marcha perfectamente utilizable en situaciones especiales.

En fin, para que negar que la moto nos ha gustado y mucho, especialmente por la facilidad de uso y a la vez por sus innegables prestaciones. La Sherco 03 hace que nosotros, casi sin darnos cuenta, saquemos la quinta esencia de nuestro pilotaje y podamos disfrutar más que nunca de esas bonitas sensaciones que transmite el trial cuando la moto está justo al nivel que nosotros necesitamos.

   Sin duda en Sherco van a tener que trabajar duro para que la 2.004 sea mejor que esta nueva edición que se acaba de presentar, y es que otra vez han puesto el listón muy alto.

   Pincha aquí para ver la presentación de ésta moto